Consejos para rearrancar a PXE o USB
Cuando se despliega un servidor nuevo sin configurar, no hay ningún disco configurado desde el que realizar el arranque. Esto significa que el sistema debe arrancarse desde otro soporte, como una unidad de CD o DVD, así como desde un puerto USB o desde la red utilizando el entorno de ejecución de prearranque (PXE). En ocasiones, puede que la instalación rearranque el servidor que se está desplegando durante la secuencia de tareas a fin de completar el inicio de una configuración, como la definición de discos de matriz.
Cuando se utiliza una acción estándar Reboot computer (Rearrancar sistema) dentro del Editor de secuencia de tareas, la acción requiere una partición grabable, ya sea para rearrancar al sistema operativo existente o para copiar WinPE en el disco y volver a arrancar a WinPE. Si asigna una tarea de rearranque a un servidor y no se dan estas condiciones, la secuencia de tareas produce un error en dicha acción. Si no existe una partición de arranque válida, el equipo no puede rearrancarse en medio de una secuencia de tareas.
Si utiliza PXE y el servidor simplemente finaliza la secuencia de tareas y se rearranca por sí mismo, Configuration Manager no vuelve a anunciar el arranque de PXE al equipo. El anuncio del PXE debe restablecerse si es preciso volver a ejecutar la misma secuencia de tareas. Por lo tanto, es probable que el servidor se rearranque a un estado desconocido y se detenga al aparecer el mensaje No Operating System (No hay sistema operativo). Puede asignar una segunda secuencia de tareas al servidor; no obstante, cuando la primera secuencia de tareas finaliza, la segunda se inicia de inmediato, sin que se produzca un rearranque entre las mismas.
Si usó soportes de arranque tales como un CD, un DVD o una unidad USB, el resultado es el mismo; la tarea produce un error cuando se ejecuta la tarea de rearranque, pues no existe una partición de arranque válida. Si fuerza la finalización de la secuencia de tareas en lugar de realizar el rearranque, el sistema se rearranca y vuelve a iniciar la secuencia de tareas. Si no aplica algún tipo de control de flujo condicional, la instalación vuelve a ejecutar las mismas tareas.